El escritor iraquí Muhsin al Ramli vive en la capital española, Madrid. Escribe tanto en árabe como en español, aunque la mayor parte de sus escritos y de su producción literaria están vinculados a la lengua árabe. Al Ramli pertenece a la generación de los noventa, y es hermano del fallecido escritor Hasan Mutlak, ejecutado en época de Saddam Huseín acusado de intentar derrocar al régimen. Tal vez fuese la ejecución de Mutlak, más las guerras de Iraq con Irán y Kuwait los fundamentos que forjaron la conciencia de Muhsin al Ramli. Después llegaría su dominio de la lengua española para abrirle amplios horizontes. Esta formación amplía a otra lengua sus influencias literarias y artísticas. Es autor entre otras cosas de novelas, relatos, poesía y también traductor, y entre sus novelas se encuentran Dedos de dátiles, Migajas esparcidas, Los jardines del presidente, y entre sus libros de relatos Regalo del siglo que viene y Naranjas de Bagdad y amor chino.
El tema de la identidad de un emigrante iraquí en Europa es la cuestión principal en Dedos de dátiles. ¿Hasta dónde llegó a responder a la cuestión de la identidad siendo, como dice, una mezcla hispano-iraquí?
Acabé con eso durante y después de la escritura de “Dedos de dátiles” aunque ahora creo que se ha dicho y se ha escrito sobre la identidad y la globalización más de lo que se debería y más de lo que esos temas merecen. En esos dos temas hay mucho de fantasía, habladuría, todo el mundo habla de estos conceptos que están repletos de racismo, egoísmo y de las limitaciones de la humanidad del ser humano. Cuando acabé Dedos de dátiles me reconcilié conmigo mismo y el tema de preocuparme cuánto tengo de una cultura o de otra, o el tema de la preservación de la identidad de un grupo determinado; no hay que temer por la apertura, por la globalización de lo que es profundo, auténtico, verdadero. Y es estúpido hacer un esfuerzo desesperado por conservar lo que no es así, es mejor dejar que lo barran los vientos del movimiento de la vida.
(…)
¿Qué me dice de la traducción entre el español y el árabe? ¿Le aporta o le quita tiempo para escribir?
Las dos cosas, me aporta y me enseña muchísimo, y me quita tiempo que desearía dedicar a la escritura y a otros proyectos personales míos. Pero creo que la traducción es una obligación del que sabe otra lengua; si todo árabe que habla otra lengua tradujese un libro, nuestra situación y la de nuestra cultura sería completamente diferente a la que es ahora.
(…)
Si necesita una traducción de este artículo, puede solicitarla en el siguiente correo electrónico: contacto@fundacionalfanar.org
Pueden consultar más de 170.000 artículos de prensa árabe en español en el Fondo documental Al Fanar
En cumplimiento con Ley 34/2002, de servicios de la sociedad de la información te recordamos que al navegar por este sitio estás aceptando el uso de cookies.